Hace
aproximadamente un año, gracias a unas putas pastillas destinadas a ayudarme
con el insomnio perdí una masa jugosa de memorias. No solo eso, sino que tras
consultar con un psiquiatra, el mismo hijo de puta que me dio las pastillas sin
advertirme de los posibles efectos, me dijo que probablemente ya había estado
sufriendo de pérdida de memoria pero no lo sabía.
¿Por qué
habría de olvidarme de cosas si mi problema es la dificultad para dormir?
Quizás hayas
oído o no de las llamadas “pausas de respiración” que vienen junto con la apnea
del sueño. Reduciendo el tamaño del texto “dormis mal porque respiras mal”
No termina ahí,
la falta de oxígeno en el cerebro causa cambios en la microcirculación del mismo órgano y provoca cambios estructurales en éste.
Cuando
prácticamente no dormís por unas 48 horas y empezás a soñar despierto, las mismas pausas se dan
mientras estás en tu rutina diaria. Y eso es algo que, irónicamente, recuerdo
haber sufrido.
Esto es
enteramente personal, no sé si a otros les pasó igual, ni me interesa. Es mi blog, no el de todos los que sufren de apnea del sueño. Es mi versión
de qué se siente.
Como en
aquellos días no estaba del todo consciente no me sometía a tareas muy
complicadas. A veces mi día consistía en constantemente ir de un punto A a un
punto B. Llevando algo, pagando cuentas, haciendo algún que otro mandado.
Bueno, a veces, entre los puntos A y B no existía distancia recorrida.
Me quejaba
de tener que caminar unas 20 cuadras para hacer cada tarea, pero se sentía como
solo caminar unos metros, o a veces llegaba allí en un parpadeo. Era sumamente
escalofriante ya que, mientras eso ocurría, yo no tenía idea de que existía tal
efecto del insomnio y era más terrorífico aun teniendo en cuenta que, si me
cruzaba con alguien, mandaba mensajes de texto o charlaba con alguna persona en
aquel periodo eliminado de mi memoria… no lo recordaba, y aun no lo recuerdo.
Muchas personas me llegan a mencionar conversaciones que tuvimos en aquella
época cuando yo juraría que hace años no los veo. Hasta organicé reuniones a las que no asistí.
Hasta ahí no
es tan torturador haber perdido momentos de mi vida, ya que aquellos no eran
tan especiales. Los que sí puedo decir que me afectan y me hacen sentir un ente
total y una persona sin, valga la redundancia, personalidad son los recuerdos
con personas a las que amo, o amé.
De básicamente
todas mis parejas, así las llame novias o cualquier otra cosa, de todas olvidé
más de lo que recuerdo. No sé si nos llevábamos bien, no me viene a la mente si
nos queríamos, si nos amábamos, no las recuerdo riéndose de algo y en
profundidad esto hace que no me sienta como alguien de edad alguna. Ni joven ni
viejo.
No sé cuáles
son las experiencias que me formaron, no sé por qué trato a mis actuales
parejas de la forma en que las trato, no sé si estoy repitiendo errores o no y,
habiendo terminado una relación hace poco, no sé si dentro de unos días estoy
por olvidarla también. Es más, ese es un miedo constante que tengo cada noche
antes de acostarme.
Porque ¿qué
somos sin nuestras memorias? Se supone que nuestra capacidad de recordar nos
permite autoevaluarnos y llegar a veces a grandes conclusiones, cómo
comportarnos y por qué. Forma nuestra ética, moral, nuestras inspiraciónes, códigos de comportamiento no tan automáticos.
Suelo leer
textos viejos míos o ver fotos y no me reconozco, no creo ser la misma persona
y es como si estuviese ocupando el cuerpo de alguien más. Alguien que sí estuvo
en esas situaciones. Es una crisis de identidad, quizás no grave, pero sí molesta. Es una piedra en el zapato.
Desconozco a
muchas personas que dicen haber sido amigos míos por largos periodos. Recuerdo sus
nombres, apellidos, su forma de hablar, pero no los identifico con sus rostros.
A casi todos mis conocidos los siento como extraños intentado hacerse pasar por
otra persona. No sé si son quienes dicen ser.
No estoy
seguro de por qué mi mejor amiga es mi mejor amiga o por qué algunos se
sinceran tanto conmigo en momentos privados y más de una vez recibí un trato
especial (bueno o malo) de alguna que otra persona en un espacio público y me pregunté-¿La conozco de
antes? ¿es esta la primera vez que la veo?
Tengo
problemas diferenciando memorias de, quizás, sueños o simplemente ideas que
habré tenido en algún momento, antes de ser consciente de mi apnea.
Olvidé
canciones, películas, libros, gente, relaciones, rencores.
Si en pocas
palabras tuviese que responder la pregunta del título del texto diría que se siente
como si hubiese nacido hace un par de horas. No es lindo.
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