12/4/15

Mujeres Grosas del Cine #2

Otra vez aquí, citando personajes que valgan la pena, de los que en la actual década escasean. Para no decir que se ausentan, voy a tomar ésta vez de ejemplo a una peli con no muchos años de antigüedad.


Tenía planeado recomendar Savage Streets, de linda Blair, pero no.

Qué tal una película en la cual hay un personaje femenino secundario tan, pero tan, pero TAN groso que eventualmente te haga desear que fuese ella el protagonista.


Además de ser quien lo entrena continuamente, éste, su aprendiz, el personaje principal de la historia nunca alcanza el nivel de su entrenadora. Es, en mi opinión una de las mejores actrices del momento y su belleza no tiene nada que ver con el aprecio que le tengo, sino su dedicación y lo bien que hace su trabajo.

En Edge of Tomorrow (Al filo del mañana o Edsh of tumorro) Emily Blunt re rrrrompe el ojete a un buen número e aliens muy superiores a los Xenomorfos que pelean contra Rippley en El Octavo Pasajero y además se pone por encima del personaje de Tom Cruise, a tal punto que éste le tiene un poco de miedo.




Lo que la hacen una mujer grosa del cine no es su destreza física, porque, al igual que el personaje de Sigourney Weaver(creo que se escribe así) necesita de un exoesqueleto para patear culos interestelares.



Lo que la hace grosa, venosa y gggggggaaaaAAAAHHH! Es su personalidad, su liderazgo, siendo una de las pocas, sino la única mujer en una película llena de testosterona, al verla hablar sabes que todos, absolutamente todos la van a seguir, porque es una mujer que no solo sabe lo que hace, sino que sabe cómo darlo a entender.


Es un personaje que no tiene miedo levantar el mentón ante sus autoridades, no se deja llevar machos en cuero y nunca llora porque venga un hombre a salvarla, ella es quien tiene que salvar a los demás y lo entiende.


En un momento se llega a hablar de alguien a quien ella amaba y no mariconea, en un pedazo excelente de dialogo le dice al personaje de Tom Cruise que se arrepiente de haberse encariñado en el pasado y le recomienda no hacerlo.

¿Cuantas veces vemos en una película a una mina rechazando al galán principal y tener una buena razón para ello?

Es un verdadero ejemplo de lo que falta y de lo que se necesita en el cine y no queda más que agradecer que existe.