12/5/16

Review de una serie: Hannibal



Al contrario de lo que muchos creen, Hannibal no nació en el cine. Se basa en novelas y estas en parte en Td Bundy y Ed Gein, entre otros asesinos seriales infames.

Pero qué puta importa, que tal está la serie?

Creo que lo que mejor describe la experiencia es la “escencia”. Ya que es una serie con mucha esencia, sea cual sea la situación.

Al tratarse de un personaje tan perturbador como el de el Dr. Lecter debería ser muy difícil empatizar con éste. Pero no es así.


La música y el atractivo visual logran que cuando está ocurriendo un asesinato o un acto previo, posterior o presente de canibalismo te sientas agradado con ello. Se siente bien verlo y eso es lo que logra perturbar, que empatices y te caiga bien un tipo que disfruta matar y comerse a sus víctimas.

No es del todo un sociópata, lo cual resulta confuso a veces. No finge todas las emociones, llega a tener amigos, deseos sexuales y en parte un enamoramiento por la ingenuidad. Es curioso y más importante aún, consciente de su curiosidad y las demás cualidades anteriormente mencionadas. La complejidad que le dieron los escritores llega al punto de casi romper la cuarta pared, ya que Hannibal Lecter asiste a terapia por mismísima curiosidad de explorarse a sí mismo y no poder.

Llegas hasta a olvidar que es un personaje ficticio y si te toca describirlo vas a sentir que estás hablando de una persona real, de carne y hueso, que conoces.


Por ahora hay tres temporadas y las tres están llenas de linda música, fotografía y actuaciones de la puta que te parió. Lamentablemente la tercera es un poco más lenta y difícil de mirar, pero para ese momento ya sentís a Lecter como un conocido y es casi como cuando un compinche te cuenta una anécdota aburrida, pero la cuenta tan bien que terminas escuchando como el esclavo sexual que sos.