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Disfruten...
Después de hablarme al oído,
caminó hasta mi balcón, y de un salto se volvió
al suyo.
Para este momento yo … con los
ojos totalmente abiertos, lagrimeando, y temblando como nunca, intentaba
sentarme.
Los golpeteos de mi corazón
eran tan fuertes ahora, que creo que me iba a dar un ataque.
Sentí algo quemándome la
garganta, al parecer era bilis. Ya sentado en la cama, me miraba las manos, y
se movían frenéticamente, nunca había estado tan asustado, vomité bilis y
empecé a toser. Respiraba raspando mi garganta, me faltaba el aire, estaba
demasiado asustado.
Cerré todo bajo llave y está de más decir que esa noche no dormí.
Cualquier ruido, por más mínimo que fuera, yo me despertaba gritando –AAAAH ,
AAH!!
Cuando me fui, tropezando
varias veces (por mis piernas licuándose) al baño a lavarme la cara, en mi
reflejo observé que la tenía muy deformada por el susto, sentía como si en
cualquier momento, veria a alguien salir de detrás mío. Nunca había visto
tantas arrugas en mi frente, ni una expresión de terror como tal.
Entonces vi, por el mismo
espejo, una esquina blanca que salía de mi bolsillo. La saqué lentamente, era
el papel que había levantado en la casa de Eli.
Decía- debilitación constante de los músculos pequeños, cardiacos, de uso involuntario , y del metabolismo - y por encima tenia marcado el sello de un Doctor.
Decía- debilitación constante de los músculos pequeños, cardiacos, de uso involuntario , y del metabolismo - y por encima tenia marcado el sello de un Doctor.
Más abajo de esto decía –
constante aplicación de gotas en los ojos para evitar peores lesiones de
córneas y pérdida de la vista. Suministración de morfina en grandes
proporciones para evitar las constantes migrañas u otros dolores y estimulantes
para evitar la debilitación crónica del ritmo cardiaco .-
¿Qué era este tipo? ¿Que tenia?
Pasaron así las horas y yo no dormí un carajo. Para las 1 PM no aguanté mas, bajé las escaleras y golpee la puerta de mi chica.
Tardó mucho en atenderme.
Cuando así fue, me abrió la puerta con una remera y un short.
Tapándose los ojos de la luz de afuera. Entré rápido y le dije- cerrá la puerta, cerrá la puerta.- y ella diciéndome- ¿no es un poco temprano para vos?- pero yo me puse a mirar a través de la cortina si David no pasaba.
Tapándose los ojos de la luz de afuera. Entré rápido y le dije- cerrá la puerta, cerrá la puerta.- y ella diciéndome- ¿no es un poco temprano para vos?- pero yo me puse a mirar a través de la cortina si David no pasaba.
-Javi, ¿que te pasa? Estas
temblando como loco- me dijo mientras me ponía la mano en el hombro.
-Este tipo, David, es un loco de mierda, le falla.- le dije con mucho miedo en mi pecho, agitando mis manos involuntariamente.
Ella puso cara de enojada y dijo- Javi- con la mano en la frente- La mierda, ¿de verdad estas así de celoso?-
-Este tipo, David, es un loco de mierda, le falla.- le dije con mucho miedo en mi pecho, agitando mis manos involuntariamente.
Ella puso cara de enojada y dijo- Javi- con la mano en la frente- La mierda, ¿de verdad estas así de celoso?-
- Nooo, noo, boluda, no entendés,
este tipo se metió en mi casa anoche, se pasó a mi balcón y se metió, le pego
un mordisco a carne cruda, encima…creo que mató a uno de mis client…digoo a un
amigo mío-
Ella achinó los ojos y mientras
movía la cabeza sintiendo vergüenza de mí, me dijo – te estuviste drogando hijo
de puta- yo le contesté que no, que no era así, pero ella insistió.
- Si, te acabas de delatar, vos
vendes eso, y te andas metiendo-
- No! Nunca siquiera probé lo
que…emm, la merca o lo que sea que crees que vendo.- le dije yo… ella me abrió
la puerta para que me vaya y dijo:
- si llego a enterarme que intentaste meterte en la casa de ese chabón, yo voy a llamar a la policía Javier, ¿me entendiste?- y yo, con mis manos cerradas fuertemente…guardándome las mil cosas que decir contesté:
- si Eli, perdón por
molestarte.- y me cerró la puerta.
Desde el otro lado gritó- me dijo que miro por la cerradura y vos estabas espiando, ¿a mí me haces eso también?-
Me quede ahí sentado, bajo la escalera un rato, pensando, otra vez con imágenes en mi cabeza, recordando la noche en la que vi de cerca su blanca pupila, y después subí a comer algo y ver si podía dormir un poco.
Mi sueño esta vez se situaba en
el departamento de David, las luces eran unos fluorescentes de muy mala
calidad, titilaban mucho y yo escuchaba el sonido metálico de algo colgando del
techo y hamacándose.
Me desperté por el ruido de un martillo,
parecía estar golpeando unas piedras semi-huecas, pero al romper, se escuchaba
como madera.
Era mi vecino de al lado. Repetidamente, las
golpeaba hasta que escuchaba que se rompían y después parecía tirarlas a un
tacho de basura. Ya eran como las 7 de la tarde, empezaba a anochecer.
Entonces, escuché que levantó
su bolsa, salió del departamento, se iba a sacar la basura. En ese momento no
dudé mucho en qué hacer. Rápidamente, crucé a su balcón, pero estaba cerrada la
ventana, y ahora ya había cortinas. Por un pequeño espacio abierto de la misma,
vi en el suelo una mano, a la cual le faltaban cachos de carne.
La escena me dio mucho asco, y
me voltee para evitar vomitar, y ahí vi
a mi vecino, en la vereda…dejando su basura en el canasto para que el camión lo
busque dentro de unas horas.
Ni bien dejó su basura, caminó hacia la
entrada del edificio…pero a mitad de camino se detuvo.
Y se quedo ahí parado por unos
diez segundos. Yo desde su propio departamento lo miraba, cuando de repente, se
sacó sus espejados lentes, y miró hacia arriba, más exactamente hacia donde me
encontraba yo, a mi.
Sus ojos eran completamente
blancos, y los bordes de sus parpados eran de un rojo casi negro. Y ahí los
tenia, apuntando hacia mí.
Me asuste muchísimo otra vez,
volví a mi pequeño y cercano hogar y me encerré de nuevo, hundido en todos los
miedos posibles.
Temblar, ya se había vuelto una
costumbre para mí en esos momentos, y mientras respiraba a toda velocidad, mi
voz se mezclaba con mi respiración, y me asustaba a mí mismo de a ratos, con
estertores.
Sentí como si en cualquier
momento él fuese a tocar mi puerta, o tirarla abajo, pero esto no pasó.
Pegué mi oreja a la pared y
seguí escuchando.
Entró, cerró la puerta y lo
sentí mover algo de vuelta, supuse que sería un cuerpo, el de mi cliente. Y
siguió martillando, lo que esta vez supuse serían los huesos de la persona a la
que vi tirada…
Pero claro, estaba martillando los
huesos hasta romperlos y así poder tirarlos a la basura sin levantar sospecha
alguna.
Mientras seguía escuchando los
golpazos, levanté mi celular, y empecé a marcar el número de la comisaría más
cercana… escuchaba que sonaba una vez…dos veces, tres veces, no me atendían.
Y hubo silencio, los
martillazos cesaron. Cuando escuché.
TOC TOC TOC TOC
Levanté la mirada y ahí lo tenía
a David, en mi balcón, golpeando el vidrio con una mano y con la otra sosteniendo
el martillo, ambas, así como su ropa y botas, manchadas de un líquido rojo
obscuro, resecándose y pegándose a la piel… bajé el teléfono y corté la llamada
justo cuando me atendieron, me paré y agarré el escurridor.
Lo sostuve como si fuese una
afilada espada y abrí de golpe la puerta-ventana corrediza.
Él como siempre con sus lentes
puestos me dijo- ¿cómo supiste que venía a pedirte el escurridor?- me lo quitó
de las manos y se pasó a su balcón de de vuelta.
Se volteó y pronunció- se me cayó una botella de salsa
de tomate.-
Me paré afuera y lo miraba
escurrir mucho líquido rojo desde adentro, para que caiga en el orificio que
conecta las canaletas.
Entonces me dijo- mañana a la
tarde voy a hacer bastante ruido, te aviso, tengo que perforar el techo con el
taladro, voy a colgar un candelabro. ¿No tenemos vecinos arriba no?-
Yo le contesté- no, no, el tercero
es el último piso- entonces con su molesto acento y su gruesa voz dijo- ah
cierto, si, lo vi, hace un rato mientras sacaba la basura.- e instantáneamente
me preguntó- ¿qué te parece mi balcón? Bastante parecido al tuyo ¿no?.-
Se me heló la sangre instantáneamente,
y volví a sentir los pálpitos de mi corazón, tan fuertes como los martillazos
que escuchaba hacia un rato.
Y siguió diciendo, mientras
tiraba un liquido para limpiar pisos y agua, colocando un trapo al escurridor
para esparcirlo- Sos un tipo muy curioso Javier, eso no puede ser bueno para tu
salud- y yo, asustadísimo le contesté- ¿Qué mierda tenés ahí adentro hijo de
puta? ¿Un cadáver?-
Él me dijo- eso a vos no tiene
por qué importarte Javi, así como a mí no tiene por qué importarme lo que vos
tengas en el tuyo- puse mi celular por detrás mío y presioné el botón para
realizar llamadas.
Él me sonrió y detuvo su
limpieza, para sacar un frasco blanco de su bolsillo, retirar sus lentes y con
los ojos cerrados empezar a ponerse sus gotas, mientras me decía- no serás tan
imbécil y torpe como para llamar a la policía ¿no?- y ahora ya me era necesario
respirar por la boca, mientras él seguía- yo tengo algo tuyo acá mirá- y sacó
una bolsita con 1 gramo de cocaína de uno de sus bolsillos
- Hijo de puta, sos un hijo de
mil pu…- le decía yo, cuando me interrumpió con- shh, sh, sh, vos a mi me
tratas con respeto- mientras se colocaba los lentes de nuevo y se ponía a
seguir trapeando
- Acá adentro, aparte de mi
nuevo juguete, tengo tres bolsitas más- dijo. Y empezó suponer- digamos,
digamos, hagamos de cuenta que vos sos tan mal vecino como para llamar a la
policía, digamos que consiguen la orden
judicial para entrar a mi departamento,
digamos que encuentran estas bolsas con evidencia…- y detuvo la limpieza- Evidencia
suficiente para revisar todo el edificio, antes de que puedas encontrar la
forma de sacar todo lo que has de tener ahí escondido-
Yo solo cerraba los puños y
enfurecido me iba para adentro otra vez, cuando me dijo- Pst! Pará- y me dió de
vuelta mi escurridor- Gracias- e intentó limpiarse las manos en un balde con
agua, lo cual le costaba, ya que con lo que se había ensuciado, estaba sólido.
Mientras me iba para adentro me
gritó- ¿no odias cuando se te coagula la salsa de tomate?- seguido de unas risas.
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1 comentario:
Disculpe la ignorancia Mr Mono pero como hago para continuar con el capitulo IV? :)
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